El IPC de 2021 se cierra con un incremento del 3,3%

Un 3,3%. Este ha sido el porcentaje con el cual se ha cerrado el índice de precios al consumo de 2021. El incremento, empujado en gran parte por el aumento del sector del transporte (8,3%), del traje y calzado (5,3%) y de la restauración (3,3%), repercutirá también en el salario mínimo, en el sueldo de los funcionarios y en los contratos de alquiler.

En este sentido, el ministro de Finanzas, Eric Jover, ha indicado que el IPC andorrano está por encima del indicador francés (2,8%), pero también ha recordado que está muy por debajo del español, el cual ha cerrado el año con un incremento del 6,7%. Respecto a la tendencia de Andorra, Jover ha recalcado que la inflación del país podría haberse acercado mucho más a la española si no fuera porque "tenemos la suerte de tener el control de FEDA y una política de estabilización de precios de la electricidad".

Como siempre, el indicador se traslada también al salario mínimo, que se incrementará hasta los 1.157,87 euros, cifra que se ajusta prácticamente al aumento previsto por el Gobierno, que había calculado una subida del 3,2% para ir acercándose al objetivo que acontezca el 60% del salario mediano. En este sentido, el incremento del IPC también repercutirá en la subida del sueldo de los funcionarios y se trasladará a los contratos de alquiler, que se podrán subir hasta esta cantidad.

El titular de Finanzas también ha apuntado que se trata de una cifra superior a la prevista en las cuentas del 2022 y, por tanto, repercutirá en la previsión presupuestaria en cuanto a la nómina de los trabajadores públicos, pero también por diferentes contratos indexados con el IPC y que “harán subir los gastos corrientes”. En cualquier caso, Jover ha señalado que hay margen suficiente de maniobra para asumir un IPC que es más del doble del que se había calculado en verano, cuando se preveía del 1,4%.